Voz Mediano (Nacimiento del río Queiles)

Por fin parece que el otoño se deja ver, bajan las temperaturas, la niebla nos visita más a menudo y los colores rojizos y marrones tiñen los paisajes naturales. Este fin de semana nuestro destino es VOZMEDIANO, situado en las faldas del Moncayo, vigilando al gigante desde la provincia de Soria (Castilla y León), guardando entre sus mayores secretos el nacedero del río Queiles, nuestro objetivo.

Nos atrae hasta Vozmediano ese metro de diámetro del que manan 1.100 litros por segundo, si, es alucinante y parece increíble, esta es la razón por la que es el segundo nacedero de Europa que más flujo de agua mana, razón por la cual tienen tantos turistas.

Desde el pueblo, a 600 metros lo podemos encontrar, el camino es muy agradable, ameno, sobretodo en esta época en la que el camino está cubierto por hojas recién caídas, por mucho que nos esforcemos es imposible intuir el suelo. Al final del camino hay un merendero, ideal para descansar y picar algo (y para jugar a ser niños y colgarnos de los árboles).

Desde el merendero nos fijamos en un castillo que hay en lo más alto del pueblo, ponemos rumbo hacia allí, sin saber con que nos íbamos a encontrar.  Un castillo gótico con un exterior árabe y el interior parece ser romano, del S.XV. Pero esto no es lo que nos sorprende sino un cementerio que habita en su interior. A pesar de la impresión que esto nos produce decidimos investigar su interior y nos encontramos con una torre de dos pisos, con unas escalinatas claustrofóbicas que sin apenas luz nos obligan a intuir cada peldaño. Una vez arriba observas la campana que todavía está en funcionamiento y la panorámica del pueblo es imperdible. Un puente interior que une partes del castillo, viejas ruinas que descansan entre tumbas de los pueblerinos, vamos, todo un contraste de emociones que normalmente no se suelen dar en el mismo espacio.

Recomiendo comer unas tapas en el bar del pueblo antes de partir hacia el Moncayo.